Blog abierto a TODO EL MUNDO. Si quieres enviar una crítica pedante vergonzosa que hayas encontrado, éstas son las instrucciones.

31 de agosto de 2009

Drag me to hell

A los microcríticos muchas veces se les ha acusado de pedantes. Muchas veces no. En este caso sin embargo creo que habrá algo más de consenso.

No dejo de sentir cierta abulia al comprobar que se afirma la virtud de una expresión concreta desde el tópico de la ausencia de pretensiones. Si Sam Raimi es el artífice de aquella singular mirada que rejuveneció un subgénero, y si ahora retorna a ello con tal énfasis autoconsciente, ‘Drag me to hell’ exhibe la inocua pretensión de retornar a aquellos contornos mediante la actualización en la temática y la ampliación del desenfreno que inspira cada pieza que la compone. El resultado es desequilibrante, y confieso que me sentí enfermo en algunos momentos de la proyección: un jolgorio arrollador que nos lleva hasta la moraleja final, y escasa habilidad cuando quiere sorprender al espectador. No obstante, la abrupta mirada de Raimi sigue siendo un medio efectivo para un sincero reencuentro con los contornos del fanta-terror, teniendo aquí un ejemplar -esa vieja del demonio- que es firme candidato a formar parte imprescindible de la antología.

A mi, que queréis que os diga, releída 100 veces la primera frase, sigo sin pillarla.

Visto aqui

Fdo: Portrait

25 de agosto de 2009

G.Sanz y los pajaritos

Bowerbirds: Upper Air
De regreso al nido, una caravana perdida en la masa forestal de Carolina del Norte, Phil Moore y Beth Tacular pierden la oportunidad de tomar vuelo. Paseando 'Hymns For A Dark Horse' (2008) han visto mundo pero, sin una canción con la plasticidad de 'In Our Talons', su segundo álbum se enrama entra las pastorales americanas de Bon Iver, el emotivismo de Arcade Fire y el manierista buen agüero de Andrew Bird. La naturaleza como metáfora del amor a la espera de un piquito de definición.
G. Sanz.